La norma con la que parto a la hora de realizar unas fotografías de newborn o de bebés, es que me tiene que entusiasmar. Como consecuencia, debo superar tus expectativas con respecto a las fotografías que esperas de tu bebé. En otras palabras, el plan en una sesión de fotos es exigirme que el resultado sea igual o mayor al que estaba planeado. El cliente, en este caso tú, debes salir con la satisfacción de que ese resultado ha superado tus expectativas.