Continuando con el tutorial anterior sobre cómo importar fotografías a Lightroom, en este tutorial, utilizaremos los paneles que vemos al lado derecho de la interfaz, como son Administración de archivos, Cambio de nombre de archivo, Aplicación durante la importación y Destino, para explicar como podremos modificar los fotografías a importar, es decir, cambiaremos el nombre con el que se copian a nuestro disco duro, el modo de previsualización de las imágenes, así como el lugar donde vamos a guardar las fotografías importadas, entre otras cosas.
Lo primero que nos encontramos es la pestaña Administración de archivos. Dentro de ésta, podemos determinar la interpretación que se hará de las previsualizaciones, mediante un menú desplegable que se encuentra a la derecha del título.
Las previsualizaciones son las interpretaciones que Lightroom hace de las fotografías que se vayan a importar, es decir, como de rápido se van a mostrar esas imágenes al hacer zoom sobre ellas una vez que se añaden a Lightroom. Dentro de las tres opciones de que disponemos en el menú desplegable, podemos distinguir dos tipos de interpretación, el primer tipo, cuando Lightroom muestra las previsualizaciones que le vienen dadas desde la cámara (Mínima e Incrustadas) y, el segundo tipo, cuando Lightroom muestra las previsualizaciones así como él las interpreta (Estándar y 1:1).
Creo conveniente, antes de nada, hacer una pequeña mención sobre cómo es el proceso de creación de una vista previa, por parte de la cámara. Cuando hacemos una fotografía con nuestra cámara digital, a parte de la información propia de la imagen, se guardan una serie de datos referentes a esa fotografía, como pueden ser la fecha, la hora, apertura del diafragma, ISO, etc., aunque también puede ir incluida una pequeña miniatura de la foto realizada, muy útil, tanto para fotógrafos como para las empresas de software que las interpretan. Dependiendo del formato que utilicemos para el almacenaje de nuestras fotos (JPG. o .RAW), esta información se almacena de modo diferente; en el caso de .JPG, todos los datos referentes a la imagen van incluidos en el propio archivo de imagen, mientras que en el caso del formato .RAW esa información se incluye en un archivo con extensión .XMP, denominado sidecar, independiente del principal.
Miniaturas
Ahora sí podemos describir cada una de las opciones de que dispone Lightroom para interpretar esas miniaturas.
1. Mínima. Lightroom mostrará miniaturas en baja resolución según se importen. Muestra las imágenes teniendo en cuenta la renderización de las previsualizaciones más pequeñas, incrustadas en las fotografías. Cuando queremos hacer una previsualización algo más grande, Lightroom la realiza en ese mismo momento, con lo que tendremos que esperar unos segundos a que la imagen aparezca, esto se debe a que Lightroom no crea la previsualización hasta que nosotros no elegimos alguna de las opciones del navegador (Encaj., Rell., 1:1, etc.).
Esta es la opción que, por defecto, tengo yo señalada, básicamente porque al terminar de importar las fotografías, no hago una vista previa de todas las fotografías sino sólo de aquellas que me interesen, ahorrándome espacio en mi disco duro. Pero obviamente, esto es cuestión de gustos.
2. Incrustadas y archivos sidecar. Como ya hemos dicho, nuestras cámaras crean automáticamente unas previsualizaciones, de menor tamaño que la fotografía original, en formato JPG, para que podamos verlas en nuestra pantalla de la cámara. Estas previsualizaciones van incrustadas en las fotografías y son las que Lightroom interpreta cuando elegimos la opción Incrustadas, que una vez cargadas, crea miniaturas a mayor resolución. En este caso, Lightroom mostrará la imagen que está contenida en el propio archivo.
Los archivos sidecar son los archivos con extensión .xmp que se crean al hacer una fotografía en RAW y que contienen los ajustes de la fotografía grabados como metadatos. Cuando hacemos una fotografía en JPG, estos ajustes están incrustados en el propio archivo.
3. Estándar. Lightroom generará previsualizaciones a mayor resolución (que puede ser visible en el nivel de zoom Encajar) a medida que las miniaturas JPG son importadas al programa.
4. 1:1. Esta es una previsualización que representa el 100% de los píxeles de la imagen. Uno de los inconvenientes que tiene la creación de este tipo de vista previa es que lleva mucho tiempo en el proceso de importación, sin embargo, Lightroom trabaja de forma eficiente estas previsualizaciones, ya que lo que hace primero es generar previsualizaciones estándar y después, en segundo plano, genera las previsualizaciones 1:1 que nos permitirá hacer zoom a cualquier nivel sin tener que esperar para ver la previsualización.
Otro de los inconvenientes de la vista previa en 1:1 es que, las imágenes generadas poseen un gran tamaño y el espacio que ocupen crecerá de manera destacable, sin embargo, Lightroom nos da la posibilidad de eliminar las vistas previas una vez trascurrido cierto tiempo. Se puede configurar esta opción, desplegando el menú Editar, haciendo clic en Ajustes de Catálogo y dentro de la ventana emergente que nos aparece, seleccionamos la pestaña Administración de archivos.
Y dentro de esta pestaña, la tercera opción que podemos personalizar es la de Descartar automáticamente previsualizaciones 1:1, con lo cual sólo deberemos elegir la opción que más nos interese.
La siguiente opción, con la que nos encontramos a la hora de personalizar el proceso de Importación, es No importar supuestos duplicados, que tiene una casilla de verificación para activarla, y sirve para que no importemos fotografías que coincidan en nombre con otras que tengamos almacenadas en nuestro ordenador.
Y la última opción, pero no por ello menos importante, que nos encontramos en la pestaña de Administración de archivos es la de Realizar una segunda copia en, la cual nos permite hacer copias de seguridad de nuestras fotografías en otro dispositivo diferente al principal. Una vez que hacemos clic en la casilla de verificación, podemos elegir el destino de nuestra copia de seguridad haciendo clic en el pequeño triángulo situado a la derecha del título.
Esta opción es muy importante, pues el olvidarnos de hacer un duplicado de nuestras fotografías, puede suponer que nos quedemos sin ellas al borrar accidentalmente alguna, y cuando dependemos profesionalmente de nuestro trabajo es vital que tengamos una copia, pues hay acontecimientos que son irrepetibles y podemos sufrir un revés importante sólo por no haber hecho clic a una sencilla casilla de verificación como ésta. Incluso podemos editar libremente nuestras imágenes sabiendo que estamos respaldados por una copia.